A+S 20 años en la UC

6. TESTIMONIOS SOCIOS COMUNITARIOS

Aprender y servir nos dejan huellas profundas

SUBDIRECTORA CULTURA SOLIDARIA, ÁREA COMUNIDAD, FUNDACIÓN HOGAR DE CRISTO Ingrid Gallardo Cantero

Primero que nada, quisiera iniciar este relato desde mi propia historia, marca da por profundos aprendizajes en mi formación como Educadora de Párvu los en la Pontificia Universidad Católi ca de Chile durante la década de los 80. Fue ahí también donde descubrí

mi vocación social, que dio lugar posteriormente a mi opción de trabajar desde hace ya 33 años en la Fundación Hogar de Cristo. Estas son las huellas profundas de mi ser ciudadana. Siendo muy joven, tomé conciencia de que mi país tenía heridas profundas respecto a las comunidades pobres, injustamente excluidas, y de que vivíamos una sociedad ciega y sorda, como el Padre Hur tado había denunciado ya en la década de los 40. Pero también descubrí el poder maravilloso de la Educación como plataforma de poderosos aprendiza jes, encuentros trasformadores y trampolín para el desarrollo de capacidades y cambios de mirada. Con estos antecedentes quisiera declararles que me siento, y sigo siendo una Educadora social y desde ahí forjé mi convicción, adhesión y entusiasmo por la metodología Aprendizaje Servicio. Para el Hogar de Cristo, que cumple ya 80 años, es fundamental convocar a los estudiantes jóvenes a ser conscientes de la realidad nacional, reflexionar sobre su corresponsabilidad y emprender acciones concretas para aportar a un Chile más justo. Este no es un énfasis nuevo, ya que fue precisamente la formación de jóvenes universitarios una de las gestiones que mayor impacto tuvo en la corta vida de nuestro fundador. Para continuar con tan grande le gado, actualmente convocamos cada año a más de 2600 estudiantes de más de 79 instituciones de educación superior y de 84 carreras distintas, de Arica a Punta Arenas. La mayoría realizan prácticas curriculares, pero desde hace años se ejecutan proyectos de A+S, combinando la innovación pedagógica,

98