Experiencia de A+S 2017 - 2018

del curso queda en clases en la universidad con una ayudante, de tal manera, que el sábado

siguiente puedan asistir otras 6 alumnas, así sucesivamente el resto del semestre. En general, las

alumnas logran asistir al menos 2 veces a realizar esta actividad, mientras que las ayudantes entre

3 a 4 veces.

La metodología de enseñanza utilizada es la de Aprendizaje y Servicio, metodología de enseñanza

experiencial, definida como la integración de actividades de servicio a la comunidad en el currículum

académico, donde los alumnos utilizan los contenidos y herramientas académicas en atención a

necesidades genuinas de una comunidad (Tapia, 2006).

Al final del semestre, se realiza una actividad de cierre, donde las internas preparan una coreografía,

se hace una convivencia saludable y se les regala una polera (igual a las que usan las alumnas en su

examen final dentro de la universidad).

En 2015, se implementan charlas educativas por parte de las alumnas a las internas, además, de la

clase práctica de gimnasia aeróbica y a partir del año 2016 el curso se marca como A+S y comienza

a ser A+S con su programa modificado para dicho fin.

Estrategias de Evaluación

Evaluación Inicial con las Interna: Entrevista personal con cada interna sobre aspectos relevantes de

salud y actividad física.

Retroalimentación: constante clase a clase con las internas y alumnas.

Evaluación con las estudiantes: Percepción de la experiencia vivida a través de pregunta abierta al

final del semestre y reflexión al interior del curso los días martes.

Estrategias de Reflexión

Al final de la clase, cada estudiante formaba un grupo con internas, se presentaban y reflexionaban

sobre la actividad, si lo deseaban contaban algo más de sus vidas o planteaban alguna inquietud. Se

propiciaba un ambiente de confianza e intimidad, donde con el paso de las clases se profundizaban

aspectos emocionales que tenían que ver con vivencias personales. Al martes siguiente, las alumnas

que habían asistido contaban y compartían la experiencia al resto de las compañeras del curso que

no habían asistido al centro. La experiencia reflexiva no terminaba ahí para las estudiantes, ya que

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