Experiencia de A+S 2017 - 2018

¿Hemos Servicio?: Herramienta para evaluar el nivel de implementación de la metodología en una unidad académica logrado institucionalizar Aprendizaje

Ma. Soledad González Ferrari, Manuel Caire Espinoza y Chantal Jouannet Valderrama

Resumen

La metodología Aprendizaje Servicio es utilizada ampliamente en educación superior. Dado los

resultados que ha reportado su implementación, es que un grupo importante de instituciones ha

optado por institucionalizar la metodología dentro de sus proyectos educativos. En este contexto,

se detectó la necesidad de contar con una herramienta que permita tanto diagnosticar, como

evaluar el nivel de institucionalización de la metodología en unidades académicas.

En respuesta a la necesidad planteada, se diseñó una rúbrica, cuyo constructo teórico es el modelo

de institucionalización A+S UC. Para su validación se sometió a juicio de experto, realizándose una

revisión de cada dimensión con sus componentes, se probó y se ajustó a partir de los comentarios.

Como resultados se obtuvo la validación de una rúbrica, compuesta por diecinueve aspectos,

organizados en cinco dimensiones. Los descriptores identifican tres niveles de implementación,

buscando entregar información precisa de la presencia de diversos componentes que reflejarían en

un máximo nivel, una implementación consolidada y exitosa.

Introducción

Son múltiples las instituciones que han optado por institucionalizar la metodología A+S como parte

central de sus proyectos educativos. La razón se explica en gran parte por los beneficios que la

metodología ha reportado lograr en los estudiantes que aprenden a través de ella.

La Pontificia Universidad Católica de Chile, ha implementado la metodología desde el año 2004. En

los últimos años, ha optado por seguir el camino de la institucionalización en cada una de las

Unidades Académicas que la componen. Para lograr su meta, creó un modelo de institucionalización

(Jouannet, Montalva y Ponce et al. , 2015), que orienta las acciones a realizar para incorporar la

metodología a largo plazo. Hasta ahora no se contaba con una herramienta que permitiera, tanto al

programa A+S como a cada Unidad Académica, evaluar el nivel de logro o éxito de la incorporación

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