Experiencia de A+S 2017 - 2018

Marco Teórico

Aprendizaje y Servicio (A+S) se define como una forma de enseñanza experiencial que combina el

estudio académico con el servicio a la comunidad, mejorando la calidad de ambos y que apunta a

un cambio en el paradigma educativo, hacia un enfoque participativo y democrático (Avilés y Cols,

2016; Eyler, 2009; Kolb, 1984). El A+S está íntimamente relacionado con un modelo de aprendizaje

experiencial que destaca que el valor formativo de una experiencia depende de la riqueza de la

situación y de la validez de las herramientas y estrategias para generar la reflexión a partir de ésta

(Kolb, 1984).

La integración de los objetivos pedagógicos y de servicio se realiza mediante un diseño y

planificación del curso en donde la reflexión tiene un rol central (Jouannet, Salas y Contreras 2013).

La conexión entre el Aprendizaje y el Servicio se obtiene mediante la reflexión, la cual permite

mostrar lo que los estudiantes han realizado y su sentido, así como la manera de solucionar y

cambiar todo lo necesario para mejorar la acción (Avilés y Cols, 2016). Además, un “proceso

reflexivo”, debe ser sistemático (antes, durante y des pués de la experiencia de servicio) para la

correcta implementación de la Metodología (Jouannet, Salas y Contreras, 2013). En este sentido es

importante destacar que la Reflexión es un proceso organizado mediante el cual se consideran las

dificultades que plantea la experiencia con el objetivo de realizar nuevos aprendizajes (Páez y Puig,

2013).

Se han descrito diversas estrategias de reflexión, basadas en la descripción de prejuicios,

preconcepciones previas del socio comunitario y del servicio, en un formato abierto y que es

complejo de evaluar para un curso de Ciencias. Además, la implementación de Aprendizaje y

Servicio en Ciencias ya es difícil, por la tendencia de los científicos a trabajar en un laboratorio, sin

tener contacto directo con la comunidad , ni incorporando conceptos como “reflexión del servicio

realizado” (Del Rio et al., 2018). Para poder trabajar A+S en Ciencias es necesario contar con una

estrategia de reflexión que pueda ser evaluada de manera objetiva, con una rúbrica de evaluación

y los Diarios Reflexivos cumplen con ese propósito (Morón et al 2016) a 2015).

El diario reflexivo es una herramienta sumativa o formativa, que los estudiantes van elaborando de

manera individual o grupal (según corresponda), en base a una serie de orientaciones y criterios en

común. El diario debe permitir: 1) Identificar aquello que se aprende, tanto los aprendizajes nuevos

como los previos, 2) Valorar estos aprendizajes y prever la transferencia a la comunidad, 3) Analizar

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